1. NUEVO REY
A los 22 años, el español mostró un notable crecimiento en su juego y se volvió el karma del suizo, quien parecía imbatible.
Además de sus 7 títulos individuales de este año, se coronó con el oro olímpico en los Juegos de Beijing.
El final de la temporada fue la nota negativa del mallorquín, que decidió no participar de la Copa Masters de Shanghai y también se automarginó de la final de la Copa Davis ante Argentina.
"Creo que este año he pasado ya toda la presión que tenía que pasar. Será un año fantástico", aseguró Nadal. Y no es para menos.
El retiro sorpresivo de la belga Justine Henin, por entonces N° 1 del mundo, le abrió el camino a la serbia Jelena Jankovic para conquistar la cima del ranking WTA. Pero la travesía no fue sencilla.
Sin Henin, el trono femenino quedó ácefalo de reina indiscutida. Maria Sharapova, Ana Ivanovic, Serena Williams y Jankovic se repartieron el trono hasta que ésta última se afianzó en la cima ganando el torneo de Moscú.
La jugadora de Belgrado, de 23 años, conquistó durante el 2008 cuatro títulos (Rome, Beijing, Stuttgart, Moscú) y llegó a su primera final de Grand Slam, en el US Open, cuando perdiera ante Serena Williams.
Sin dudas, será un desafío para la nueva reina ganar su primer torneo grande durante el 2009.
El equipo del capitán Emilio Sánchez Vicario supo mantener el perfil bajo en medio de un clima triunfalista del conjunto argentino, comandado por David Nalbandian.
España tuvo al mejor Feliciano López, quien reconoció haber jugado el partido de su vida ante Juan Martín del Potro, y un Verdasco sólido, que confió en sus posibilidades y estvo bien contenido por el resto del equipo.
La diferencia entre los dos equipos no sólo quedó a la vista dentro de la cancha, con un Del Potro sin respuestas, un dobles de poco peso y ausencia de Plan B, sino también afuera. España trabajó con un verdadero equipo, sin exhibir mezquindades personales ni haciendo declaraciones precipitadas. Argentina, en cambio, se quebró internamente y desperdició su mejor opción de ganar su primera Ensaladera.
Desde hacía un par de años se venía anunciando como la gran promesa del tenis argentino y el 2008 se convirtió en el año de su explosión profesional, su salto de calidad.
El tenista de Tandil, de 20 años, estaba 65° del ranking promediando el mes de julio cuando llegó su gran momento.
La inauguración de su historial se produjo en Stuttgart, Alemania, el 13 de julio frente al francés Richard Gasquet y lo amplió en Kitbühel, Austria, una semana después ante el local Jürgen Melzer.
La tercera conquista se produjo una semana después en la final de Los Angeles frente al estadounidense Andy Roddick y se convirtió en el primer argentino en ganar un torneo en cemento en Estados Unidos en los últimos 31 años, después del triunfo que obtuvo Vilas en Virginia Beach en 1977.
Finalmente, el cuarto trofeo lo alzó en Washington ante el serbio Viktor Troicki. "Nunca imaginé esto. Mis expectativas este año pasaban por jugar buenos torneos y avanzar en el ránking", confesaba en aquél momento.
El final de la temporada no fue tan feliz para Del Potro, que si bien jugó su primera Copa Masters, perdió la final de la Copa Davis en Mar del Plata, ante España, en medio de rumores sobre problemas con su compañero David Nalbandian.
El serbio arrancó y terminó el 2008 de la mejor manera: pegó el salto en el arranque de la temporada, al ganar el Abierto de Australia y completó el año ganando la Copa Masters de Shanghai. En el medio, ganó el Masters Series de Indian Wells y el de Roma.
Pero no sólo Djokovic buscará adueñarse del trono el próximo año, sino que también habrá que considerar a Murray.
El escocés conquistó cinco títulos, entre los que se destacan sus dos primeros Masters Series (Cincinnati y Madrid), más su primera final de Grand Slam, en el US Open. Jugó además su primera Copa Masters, donde eliminó a Federer y luego cayó en la semifinal.
La pelea por el trono promete ser apasionante.
Los 5 hechos para olvidar del año del tenis 2008
1. ARGENTINA PERDIÓ LA FINAL DE LA DAVIS
Parecía que no podían ser mejores las condiciones para que Argentina gane su primera Copa Davis: recibía a España en una superficie rápida, con Nalbandian y Del Potro en un buen momento y la baja del número uno, Rafael Nadal.
Sin embargo, el camino hacia el primer partido en Mar del Plata ya dejó ver las internas que empezaban a dividir al equipo local. Primero fue la elección de la sede, con importantes intereses económicos en juego, luego fue el turno de Del Potro y la polémica sobre si era o no conveniente su participación en el Masters de Shanghai. Más tarde fue la superficie, que parecía estar más rápida de lo conviente...
En la cancha, Argentina estuvo lejors de ser un equipo. Nalbandian ganó su primer partido ante David Ferrer con mucha calidad pero luego Feliciano López aplastó a un Del Potro que no tuvo respuestas ni físicas ni tenísticas. La debacle comenzaba.
El sábado, en el dobles, la pareja Nalbandian-Calleri fue demasiado irregular ante López-Verdasco y España se quedó con un punto clave. Ya para ese entonces, Argentina quedaba sin plan B y k.o. José Acasuso salió a jugar el cuarto punto ante Fernando Verdasco en un partido a puro nervios. Y fue demasiada presión para el argentino, que en el cuarto set se desmoronó y permitió la arremetida final del español, que se llevó el triunfo y la serie para su país.
España festejó con justicia en Buenos Aires frente a un equipo argentino que se partió al medio tras la derrota. El sueño de Argentina de conquistar por primera vez la Ensaladera se hizo pesallida.
2. FEDERER DESTRONADO
Sí, Roger Federer está en el Anti Top 5 del tenis del 2008. ¿Por qué? Porque a pesar de estar N° 2 del mundo y haber ganado el US Open más otros cuatro títulos (incluyendo el oro en dobles en Beijing), el suizo tuvo su peor temporada en años. Perdió con jugadores inferiores, bajó su nivel, dejó de ser imbatible y, especialmente, fue opacado por el año espectacular de Rafael Nadal, que le ganó partidos memorables.
La superioridad de Nadal ante Federer (están 12-6 en el historial) es seguramente una de las explicaciones del bajón del suizo. El español se afirmó como su karma después de aplastarlo en la final de Roland Garros y en su tierra, Wimbledon.
Y finalmente el 18 de agosto, después de cuatro años y medio consecutivos de reinado, Roger Federer cedió el trono a manos de Rafael Nadal. Y ahora hasta podría superarlo el serbio Novak Djokovic, a tan sólo 10 puntos.
A las caídas dolorosas ante Nadal le sumó otras inesperadas como la derrota ante Gilles Simon en la segunda ronda del Masters Series de Canadá o ante Ivo Karlovic en la tercera ronda del Masters Series de Cincinnati y finalmente en el Masters de París, por primera vez en su carrera, no se presentó a jugar su partido de cuartos de final.
Lo que para muchos tenistas representaría una temporada sensacional, para Roger Federer se trata de un retroceso. El suizo sabe que perdió terreno y ya se propone recuperarlo en el 2009.
3. UN VACÍO SORPRESIVO
En la cumbre de su carrera, siendo la indiscutida N° 1 del mundo y con tan sólo 25 años, la belga Justine Henin decidió ponerle fin a su carrera.
"Desde los cinco años sólo he vivido para esto. Los últimos meses no conseguía igualar mi nivel habitual, si paro ahora puedo recordar mi carrera de tenista con una sonrisa, si espero tres meses me podría arrepentir", reconoció en la conferencia de prensa donde anunciaba su decisión.
Henin cerró precipitadamente una carrera brillante, con 41 títulos individuales, de los cuales siete fueron Grand Slams (cuatro de Roland Garros, dos abiertos de EEUU y un abierto de Australia), así como la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
Pero el tenis ya no la hacía feliz y ella misma confesó sentirse "aliviada por el anuncio".
Para la belga, entrenada durante más de 10 años por el argentino Carlos Rodríguez, no haber podido ganar Wimbledon fue su mayor frustración. En cambio, su mayor alegría fue el triunfo en el Masters Femenino de Madrid, en 2007.
Henin colgó la raqueta y cambió el sueño de ganar trofeos por el de formar una familia y ser mamá.
4. UN ADIÓS ANUNCIADO
Después de varios de años de jugar muy lejos del nivel que lo llevó al N° 1 del mundo, el brasileño Gustavo Kuerten, con 31 años, le puso fin a su carrera nada menos que en Roland Garros, donde fue tres veces campeón (1997, 2000 y 2001).
"Este Grand Slam es mi vida, mi pasión", confesó Guga, ovacionado después de perder en la primera ronda ante el local Paul-Henry Mathieu, en el que fue su último partido como profesional.
Guga, ganador de 20 títulos individuales, fue el primer y único jugador de Brasil en ganar un Grand Slam y uno de los jugadores más respetados y queridos del circuito.
Cálido, descontracturado, sensillo y siempre alegre, el tenista de Florianópolis que supo ser número uno del mundo en el 2000, desde hace tiempo había dejado de estar en los primeros planos del circuito, debido en parte a una lesión en la cadera de la que nunca se recuperó completamente luego de su primera operación en 2002.
"Ahora tengo que ocuparme de otras cosas, tengo que ocuparme de mí", reconoció el brasileño tras el retiro.
5. LATINOS SIN BRILLO
Exceptuando la medalla de plata del chileno Fernando González en Beijing y el año de la explosión del argentino Juan Martín del Potro (ganador de cuatro títulos ATP consecutivos), el año del tenis latinoamericano estuvo por debajo de los años anteriores.
El tenista de Tandil, que no terminó bien el año después de la caída dolorosa en la final de la Copa Davis ante España, fue sin embargo el único jugador de la región en alcanzar los cuartos de final en un Grand Slam (US Open).
A su vez, el único latinoamericano en superar los cuartos de un Masters Series fue el argentino David Nalbandian, finalista de París-Bercy. Ni siquiera en polvo de ladrillo, la superficie reina de la región, pudieron destacarse.
Y entre las chicas, si bien la argentina Gisela Dulko ganó el título de Fes, ninguna quedó entre las 50 del ranking.
(Fuente de información: espndeportes.com)